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- iPhone 4S: para algunos el primer síntoma de debilidad de la era post-Steve Jobs. Para otros el aperitivo para el iPhone 5, para la mayoría una necesaria puesta a punto para aprovechar al máximo iOS 5 y mantener la distancia frente a una competencia cada vez mejor y más numerosa. Alcanza los 64 gigas de almacenamiento, disfruta de una cámara de 8 megapíxeles capaz de grabar vídeo HD 1.080p y cuenta con la celebérrima pantalla Retina. Su procesador de doble núcleo Apple A5 a 1 Ghz debería rendir menos que los de sus rivales pero, del mismo modo que con los Mac, los de Cupertino se encargan no sólo de que esto no ocurra, sino de dejar atrás a la competencia. Sus récords de ventas las primeras semanas le auguran una gran vejez… excepto si el iPhone 5 llega tan pronto como se espera.
- Samsung Google Galaxy Nexus Prime: podría ser el último terminal bajo la marca Google tras la compra de Motorola. También la última vez que Samsung estrena la última versión de un entorno Android. En cualquier caso, es la mejor obra de ambos hasta el momento -con permiso de Galaxy S II de los coreanos-. La mejora en el manejo de las aplicaciones y en la integración con otros dispositivos ha aumentado. Su resolución y cámara han mejorado exponencialmente -aunque no llegan al del iPhone- y su implementación con el entorno Google es, simplemente, maravillosa. Lo más característico de su diseño es la total ausencia de botones en su cara frontal. Le da una imagen impactante -sobre todo si nunca has usado un “Android” y no sabes por dónde empezar-. La carcasa de metal pulido guarda el mejor secreto: basta con dictarle al teléfono el ID de Google y la contraseña para que, en menos de un minuto, todo nuestro “historial” Google quede integrado: contactos, teléfonos, búsquedas, preferencias, fotos, música, redes sociales: impresionante. La aplicación de reconocimiento facial para el desbloqueo del teléfono es sólo la punta del iceberg de lo que Google está dispuesto a hacer con nuestros equipos. Un gran paso adelante.
- Samsung Galaxy S2: el otro gran Android del mercado. En breve superará los 20 millones de terminales vendidos de su antecesor. No es de extrañar, su pantalla Super AMOLED de 4,3 pulgadas, su procesador de doble núcleo a 1,2 gigas, su RAM de 1 GByte y su increíble grosor de 0,85 cms hacen de este terminal el rival más directo -de momento- del iPhone. Sus buenos precios subvencionados por operadoras así como el buen rendimiento de la versión Gingerbread de Android (justo la anterior al renovado Android 4) hacen de éste un terminal recomendable. ¿Lo mejor? Si han hecho esto con la versión 2, ¿qué conseguirá su sucesor? Por cierto, desde principios de 2012 será actualizable al nuevo SO de Google.
- HTC Titan: antes de la llegada de Samsung y sus Galaxy, los mejores androides del mercado eran los de los taiwaneses. Ahora han decidido diversificar sus proveedores y trabajan también con Windows Phone 7.5 Mango. Con una pantalla de 4,7 pulgadas -no apta para pantalones estrechos- y 1,3 cms de grosor, este enorme dispositivo se jacta de un procesador a 1,5 ghz -eso sí, sólo de un núcleo-, una cámara de 8 mpx optimizada para trabajar con poca luz y una pantalla revestida de Gorilla Glass. Con estos datos jugar a la Xbox será un regalo… y ver películas también.
- Sony Ericsson Xperia Arc S: sin duda, uno de mis favoritos. Al buen hacer de los japoneses hay que añadirle una genial simbiosis con Android. Su maravilloso diseño con la base ligeramente arqueada nos permite manejarlo más fácilmente. Además, su procesador Qualcomm Snapdragon lleva el móvil hasta los 1,4 Ghz -lo que deja sus 512 MBytes de RAM algo escasos-. Sus aplicaciones propietarias como Facebook Inside Xperia 2.0 y su cámara HD Cybershot que permite capturas panorámicas en 3D, así como su suite fotográfica que permite escalados desde 2D hacen de este un teléfono digno de James Bond (desde aquí apostamos a que será su próximo terminal en Skyfall). En la línea de otros productos Sony: infalible.
- LG Optimus 2X: los coreanos que lanzaron el primer equipo con procesador de doble núcleo han decido seguir dando lo mejor con esta gama (que recibe el nombre de su patrocinio a la segunda película de Transformers y, por tanto, al líder Autobot): procesador a 1 Ghz, 512 MBytes de RAM, pantalla OLED y, sobre todo, unas mejoras de software marca de la casa que lo hacen totalmente compatible con cualquier otro dispositivo de LG. Una buena opción a un gran precio.
- BlackBerry Torch 9810: se trata del teléfono de RIM encargado de romper moldes: teclado físico deslizante, pantalla ¡táctil! de 3,2 pulgadas (casi un iPhone), procesador multinúcleo a 1,2 Ghz, 768 Mbytes de RAM, un gran reproductor musical y, cómo no… integración absoluta con todos los elementos de mesajería: SMS, MMS, instantánea, email, redes sociales… Aunque el 9860 es superior -prescinde del teclado QWERTY y su pantalla es de 3,7 pulgadas- su relación calidad/precio la hacen más interesante. Por cierto, es compatible con el esperado BlackBerryOS 7. Pensada para acercar a nuevos clientes a la marca, evitará “fugas” a la competencia.
- Nokia Lumia 800: hemos visto teléfonos iOS, Android, BlackBerryOS y Windows Phone. De Apple, Samsung, LG, HTC, Sony, BlackBerry y hasta Google. Pero ninguna comparativa sería completa sin el todavía referente del mercado: Nokia. Para ello los finlandeses ponen sobre la mesa sus mejores armas: un diseño sobrio pero atractivo, un equipo muy bien construido -el propio Jobs hablaba del estándar Nokia- y un hardware que, sin ser espectacular es excelente. Palabras como policarbonato, pantalla Gorilla Glass, óptica Carl Zeiss, Nokia Drive y Nokia Maps vuelven a nuestra cabeza recordándonos que “el que tuvo retuvo”. Un teléfono excelente con un sistema operativo por fin a la altura para competir con asiáticos y americanos. Si Nokia y Microsoft reman en la misma dirección han demostrado que pueden hacer grandes cosas. No les perderemos de vista.
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